Activistas de Greenpeace en México instalan un cementerio con 200 árboles sobre ataúdes con la leyenda “víctima del Proárbol”, en el Zócalo capitalino y representando lo que ocurrirá con los bosques de México si Proárbol continúa con este tipo de programas de “reforestación”Activistas de Greenpeace en México instalan un cementerio con 200 árboles sobre ataúdes con la leyenda “víctima del Proárbol”, en el Zócalo capitalino y representando lo que ocurrirá con los bosques de México si Proárbol continúa con este tipo de programas de “reforestación”

Proarbol uno de los programas insignias de la presente administración esta resignado al fracaso admite la SEMARNAT (Secretaría del Medio ambiente y Recursos Naturales).

En declaraciones de Rafael Elvira Quezada, titular de la Secretaría, ratifica que sólo el diez por ciento de los arboles que se sembraron en el 2007 sobreviviran. Lo que contraviene a declaraciones que afirmaban que se había reforestado con éxito 642 mil hectáreas cuando en realidad solo son 25 mil hectáreas.

Aunado a la mala planeación de las actividades esta también el desperdicio de recursos ya que se desperdicia 2 mil 500 millones de pesos. En este sentido la solución más factible es promover la conservación y el uso responsable de recursos del bosque a través del Manejo Forestal Sustentable (MFS).

Por desgracia solo el 15 por ciento de bosques esta bajo este esquema por lo que 60 por ciento de los bosques en territorio nacional no recibe ningún apoyo del gobierno federal, causa por la cual cada año se pierda entre 500 y 600 mil hectáreas de bosques y fomente la tala clandestina de entre 5 y 7 millones de metros cúbicos de madera.

Si lo anterior no fuera suficiente, en el 2007 se hizo uso de fauna exótica (nopales forrajeros, agaves, magueyes, eucalipto y pirul) para la reforestación. La utilización de especies exóticas produce impactos negativos en la biodiversidad al introducir especies no nativas en un ecosistema y alterando el equilibrio de tal.

Es así que programas como Proarbol y la mediática jornada "Planta un árbol y se parte de la historia" con el cual se pretendía sembrar 5 millones de arboles en un día es un rotundo fracaso al aplicar soluciones paliativas que no resuelven las verdaderas causas de la deforestación.