Prototipo del Alpha Magnetic Spectrometer montado en la Estación Internacional. Créditos: CERN. Prototipo del Alpha Magnetic Spectrometer (AMS-02) montado en la Estación Internacional. Créditos: CERN.

Sera hasta después del verano cuando el Gran Colisionador de Hadrones (LHC) vuelva a estar en funcionamiento. Pese a las noticias negativas provenientes del CERN (Laboratorio Europeo de Física de Partículas) también surgen positivas, puesto que es en el CERN donde se completa la construcción de una maquina para responder preguntas fundamentales en la física.

El Alpha Magnetic Spectrometer (AMS-02) es un experimento que sera instalado en la Estación Espacial Internacional. Tiene un peso de 7 toneladas y un imán superconductor de 0,86 Tesla (el campo magnético terrestre es de entre 30 a 60 micro Teslas, o sea, de 0.00003 a 0.00006 T), servirá para poder estudiar los rayos cósmicos. El campo magnético que provendrá de AMS sera útil para poder estudiar las partículas que viajan por el espacio, curvandolas y con ello tratar de obtener información sobre la ausencia de antimateria en el espacio.

Puesto que la teoría física explica que en el estallido del Big Bang surgió la misma cantidad de materia y antimateria, elementos que se aniquilarían con tan solo entrar en contacto dando como resultado energía pura. Sin embargo como se puede comprobar la materia logro la existencia del Universo tal y como lo conocemos, sin embargo se desconocen los motivos por los cuales no se ha encontrado antimateria en el Universo.

De este modo empleando AMS sera posible conocer si efectivamente no hay rastros de antimateria y en caso de que haya en el Universo, podrá el espectrometro detectarla al identificar tales antipartículas por la curva partícular que realicen, producto de su masa y su carga. De lograrse su descubrimiento más que improbable sugeriría la existencia de antigalaxias y un antiuniverso.

Materia oscura

AMS tambien tiene como propósito obtener información sobre la naturaleza de la materia obscura. El dispositivo podría detectar una de las partículas candidatas a materia oscura: el neutralino. En tanto fenómenos como los strangelets o los chorros de partículas que proceden de los microquasars serían también objeto de estudio. Sucesos que observados desde la Tierra pueden ser contaminados por sucesos de fondo, algo que no ocurriría en la Estación Espacial, de ahí la importancia de su futura ubicación.

En el AMS se han destinado 1,000 millones de euro y servirá a su vez para disminuir argumentos de científicos que consideran de nula importancia científica a la Estación Espacial. Si todo sale bien estará en orbita a finales de este año.

Tetravon, un acelerador que se niega a la jubilación

El acelerador Tevatron de Fermilab (ubicado en el laboratorio de física de partículas de EEUU en Illinois) dejara de funcionar en 2010 ya que con la puesta en marcha del LHC quedara obsoleto.

Sin embargo en una de las colisiones ocurridas en noviembre del año pasado registró muones, partículas que implican la aparición de otras partículas

Si los muones fueron fruto de una nueva y longeva partícula (sobrevivió 20 picosegundos y viajó un centímetro antes de desintegrarse, todo un logro en este ámbito), es posible que se tratase de partículas de materia oscura. Con lo cual Tetravon estaría dando respuesta a una de las cuestiones que se espera resuelva el LHC.