Efecto invernadero y calentamiento global. Créditos. El Clarín.

La intervención de los seres humanos en los ecosistemas ha provocado desafortunadamente problemas ambientales. Causas como el aumento de la población humana, el abuso de recursos naturales, la sobre explotación de suelos y la tala inmoderada entre otras han modificado la biosfera y producida la contaminación.

La contaminación entendida como la acumulación de sustancias que de forma natural no se encuentran en el ambiente afecta la salud y ponen en riesgo la vida de los seres vivos.

La contaminación del aire, es provocada tanto de forma natural como también artificial, entre los contaminantes naturales se encuentran esporas de hongos, bacterias y otros microorganismos, granos de polen, gases producidos por volcanes, polvo de suelo, gases y humos provenientes de incendios naturales. Las emisiones artificiales emitidas por seres humanos proceden en mayor medida de la quema de combustibles fósiles y de la industria.

Algunos de los gases producidos por el ser humano como son el ozono, el dióxido de carbono y el óxido nitroso han producido un fenómeno conocido como Calentamiento Global.

Calentamiento global

Durante la segunda mitad del Siglo XX, científicos comenzaron a advertir sobre el riesgo que suponía el aumento del gas dióxido de carbono en la atmósfera desde que el hombre descubrió el fuego y que tal incremento se había acelerado a partir de la Revolución Industrial.

No obstante que las cantidades de dióxido de carbono son en apariencia pequeñas, son lo suficiente para provocar el calentamiento global.

El Calentamiento global es el incremento de la temperatura en la Tierra que ha provocado desequilibrios en el clima, provocando extremas sequías en regiones desérticas, incremento del frío en la parte norte del planeta y fenómenos meteorológicos cada vez más intensos.

Efecto invernadero

El dióxido de carbono y otros gases de la atmósfera, como son el metano, actúan de forma similar al vidrio o plástico que se emplea en los invernaderos, permiten el paso de radiación solar calentando el interior e impidiendo su pronta salida.

De la misma manera, en la atmósfera de la Tierra los gases de efecto invernadero permiten el paso del calor hasta la superficie y los oceános, pero el calor no regresa de forma inmediata sino se mentiene un lapso de tiempo antes de salir al espacio exterior.

El efecto invernadero no es perjudicial en si ya que permite que existan condiciones adecuadas para la vida. Gracias a este efecto la temepratura se mantiene cálida y no hay cambios bruscos entre la noche y el día.

Los científicos advierten que un incremento de temperatura entre 1.5 a 4.5 grados centígrados podría concretarse para finales del Siglo XXI si continuan las emisiones de gases efecto invernadero al ritmo actual.

Nota: Esta entrada debió aparecer el jueves 15 pero por causas de fuerza mayor hasta ahora me ha sido posible publicarla.