Polo Sur de la Luna, se observa el cráter Caebus, lugar donde impacto la sonda LCROSS. Créditos: NASA.

Los resultados preliminares de la misión LCROSS, la cual envió una sonda para estrellarse en el cráter Cabeus cerca del polo sur de la luna el pasado 9 de octubre, indica que los instrumentos a bordo de la sonda detectaron agua.

El espectrómetro confirmó aproximadamente 26 galones de agua mediante la identificación de la composición de los materiales empleando para ello el examen de luz que emiten o absorben. El equipo ahora trata de comprender cómo los compuestos que se vieron en la columna que se levanto estaban incrustados en el regolito lunar, ubicado en la parte inferior del cráter, el cual esta permanentemente en sombra.

"Se requiere analizar todos los datos - la cantidad de material expulsado, el tamaño del cráter - para con ello reconstruir todo el evento, y poder entender cómo todo encaja de nuevo en el terreno", dijo Colaprete en una conferencia de prensa Ames de la NASA.

Durante la última década, los científicos dedicados a la investigación de la Luna han reconocido que el satélite posee una cantidad importante de hidrógeno, gracias a la información que proporciono la misión Lunar Prospector, pero no se tenía claro la forma en que estaba almacenado. Ahora, las observaciones de LCROSS permiten comprender que junto al oxígeno han formado el agua.

Otros análisis también han proporcionado pruebas de que existe agua en la Luna, incluida la más reciente misión, la del satélite indio Chandrayaan. Pero las últimas observaciones de LCROSS son diferentes.

"[Chandrayaan] no podía observar en los cráteres que están en la sombra. LCROSS ha observado en cambio dentro de los cráteres ensombrecidos", dice Colaprete.

La información de presencia de agua en la Luna junto a la confirmación de hielo de agua en Marte, deja cada vez claro que el agua -por lo menos en forma de hielo- está presente en todo nuestro sistema solar.

"[LCROSS] está mostrando un nuevo cuadro verdaderamente sorprendente, de la luna. Ya no es la luna que observaron nuestros antepasados", comento Greg Delory de la Universidad de California, "más que un mundo muerto y sin cambios, podría ser en cambio dinámico e interesante."

Delory, que no está en el equipo LCROSS, también llamo al descubrimiento excitante y extraordinario, diciendo que el estudio de la luna ahora podría pasar a otras cuestiones fascinantes.

"Lo que es igualmente importante es lo que se va a hacer a partir de ahora", dijo Delory. "Investigar ¿Dónde esta el agua?, ¿Cuánto tiempo ha estado allí?, ¿En qué tipo de procesos está involucrado el líquido?"

Hay todo tipo opciones como fuentes para el agua, añade Delory. Podría venir de los cometas, el viento solar, la luna misma o incluso de la Tierra.

Encontrando la fuente del agua podría decirnos mucho sobre el sistema solar y la relación de los cuerpos planetarios con el agua, necesaria para todas las formas de vida que conocemos.

Colaprete agrega que puede haber otra sorpresa en espera, dando a entender que se vislumbran otros compuestos de interés de la columna que surgió del cráter Cabeus.

"Esto va más allá del agua, hay otros compuestos que salieron de allí", dijo Colaprete, antes de decir que no quería decir "mucho más allá" de eso.

Delory estaba muy emocionado, pero se mantiene perspicaz, "Estoy seguro de que el equipo LCROSS va a revelar nuevos y emocionantes descubrimientos a medida que se continúe el análisis de los datos".

§ Wired