Todo inició en 1998 cuando el médico inglés Andrew Wakefield, al que por fortuna ya le han retirado su licencia y debía ser lo menos que le debieron haber quitado, publicó que la vacuna triple viral causaba autismo a través de un estudio cuestionable que ha sido más de una vez refutado.
  Créditos: Council on Foreign Relations


Por desgracia más de una "figura" en la sociedad intervino y se encargó de divulgar los dudosos resultados, un hecho que por desgracia hizo que más de una familia decidiera no vacunar a sus hijos, teniendo consecuencias devastadoras.

Para tener una idea de lo peligroso que ha resultado en Vaccine-Preventable Outbreaks han colocado un mapa interactivo donde se pueden ver los brotes de tosferina, rubeola, paperas, polio, o sarampión desde 2008 hasta la actualidad.

Todas estas enfermedades bien se pueden evitar con su correspondiente vacuna, y aunque haya lugares donde aún son inaccesibles, lo cierto es que es un problema de salud.

Y es que los efectos van desde problemas que sufrirán toda la vida quienes no fueron inoculados, hasta la muerte; mientras que las áreas donde viven tales niños baja el nivel de inmunidad grupal.

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